Naturalidad

Manantial, tu que traes el agua que alimenta la naturaleza

arrastra entre tu curso el ideal que me mantenga vivo una noche más

Viento, deja de oír los cantos del día y los susurros de la noche

y deja caer sobre su regazo el poema que no puede recitar

Tierra, cuna del trabajo del hombre

alimenta mis deseos y guárdame un lugar entre las hojas resecas de un bosque olvidado

Sentado en una nube observaré la prosa que yace junto a mi ventana

y reunido con las estrellas daremos cuenta de la soledad de mi canto.

Pon los oídos al compás del vaivén natural de lo que nos rodea

y podrás escuchar entre los arbustos, mi voz incrustada en ti.